En la mayoría de regiones y municipios podemos encontrar algún producto típico, algo que únicamente se elabora en ese lugar y que ayuda a dar a conocer su lugar de origen. ¿Quién no conoce famosos los bollos de mantequilla o las carolinas de Bilbao, o la pantxineta donostiarra, o el pastel vasco de Lapurdi, o los guardiciviles de Areatza, o los vasquitos y nesquitas de Gasteiz?
Es posible que los dulces de Durangaldea no sean conocidos en todo el mundo, pero también tienen sus peculiaridades. En los restaurantes de Durangaldea podemos encontrar postres, tartas o dulces especiales (unas ricas tostadas en Carnavales, o el gatzatua, o una buena sanmarkopila), pero queremos que conozcáis especialmente los siguientes:
La torta y las rosquillas de San Blas, en Abadiño.
Aunque la costumbre de hacer una torta el día de San Blas tiene, casi con toda seguridad, su origen en Eibar, en la actualidad podemos decir que se conoce en casi todo nuestro territorio. Sin embargo, en la famosísima feria de San Blas que se celebra el día 3 de febrero en Abadiño, las tortas y las rosquillas son un producto que no falta nunca. Según dicen, Blas fue un conocido obispo y médico armenio que una vez salvó la vida de un niño al que se le había atragantado una espina de pescado en la garganta. A partir de entonces, Blas es conocido por protegernos de los males de garganta, y el día 3 de febrero se bendicen cordones que hay que llevar durante nueve días atados al cuello. Las tortas y rosquillas de San Blas solo se pueden adquirir en las fechas próximas al 3 de febrero, día de San Blas.
Pero, ¿cómo son?
Tanto las tortas como las rosquillas de San Blas llevan una masa con esencia de anís y están cubiertas por un baño blanco de merengue. Las tortas, además, llevan San Blas escrito con chocolate.
Foto: Eitb.
Las artopilak, en Durango
Cuentan que la costumbre de repartir artopilas el día de San Fausto (día 13 de octubre) en Durango data del año 1765. El día de San Fausto por la mañana, las y los concejales del Ayuntamiento reparten artopilas a las y los vecinos que se acerquen al mismo. Al principio el reparto se realizaba bajo los arcos de Santa Ana, a las seis de la mañana, antes de soltar las vaquillas. Pero en la actualidad, se reparten en el Ayuntamiento a media mañana. Como veis, hay un solo día para poder disfrutar de este dulce.
Pero, ¿cómo son?
Son unos dulces parecidos a una magdalena, un poco más grandes y más planos. En su origen, se supone que se elaboraban con harina de maíz (de ahí su nombre artopila = torta de maíz), pero ese es el único ingrediente de la receta original que ha llegado hasta hoy. La masa lleva, además, pasas y fruta confitada. Y aunque hoy en día se elaboran con harina de trigo, en el fondo de cada dulce se coloca un grano de maíz.
Reliquias de San Valentín, en Elorrio
Comenzaron a fabricar este pequeño pastel en 1988, año en que fue canonizado Valentín de Berriotxoa, y puesto que es el patrón de Elorrio, comenzaron a comercializarse como conmemoración y recuerdo del santo. Estos pastelitos están en venta durante todo el año, como «recuerdo” de Elorrio.
Pero, ¿cómo son?
Las reliquias son un pequeño bizcocho de almendras. Antes de montarlo, se introduce una porción de chocolate negro dentro de la masa, y, después, se cubre con una capa de chocolate blanco.
Repostería del Convento de Santa Ana, en Elorrio
En Bizkaia existen 18 conventos de clausura, y cuatro de ellos se dedican a la repostería como ayuda para sus gastos. Uno de esos conventos está en Durangaldea: el Convento de Santa Ana de Elorrio. Allá por 1979 decidieron comenzar con la repostería como medio para generar ingresos, y actualmente, elaboran más de 15 variedades de tartas y pasteles. Los elaboran de encargo, y no hay día en que no se vea a alguien saliendo del convento con una gran tarta entre las manos. Elaboran tartas de varios tamaños, desde 4 a 15 raciones.
Se pueden encargar hojaldres rellenos de crema o nata, brazo de gitano, tarta de moka, tarta de manzana, Selva Negra, San Marcos, Berrio-otxoa, Aitona, pastelitos de bocado, magdalenas y mostachones en esta dirección: dsantanaelorrio@yahoo.es.
Como veis, podéis llevaros un recuerdo muy dulce de vuestra visita a Durangaldea.
¡Que os aproveche!
